sábado, 12 de septiembre de 2020

 ARDALES vs. ÁLORA y vv.

El Camino del Rey

 (Capítulo I)


 

El pasado día 17 del mes actual publicaba el diario SUR en su página 9 un articulo de Antonio M. Romero con el nombre de “Ardales se enfrenta a Álora por el Caminito”. En él se relata como parece que según el alcalde de Ardales acusa al de Álora de intentar patrimonializar el Camino del Rey.

Bueno, pues todo esto no es nada nuevo, estos pequeños roces de entre vecinos, si es que se puede llamar a sí, vienen ya desde antiguo, según los entendidos desde los Repartimientos, aunque desde la mitad del siglo XIX, con la construcción del ferrocarril se avivaron las polémicas de beneficio hacia Álora en detrimento de Ardales; aunque ni una ni otra población tuviesen nada que ver. Así, a día de hoy y después de cinco años de la apertura al turismo de las pasarelas de los Balconcillos, lógicamente, cada cual barre para su casa.

Lo que queda de la presa de lo que sería el embalse de los Aviones o de Andrade (2014)
Foto: Clemente González

Si nos vamos a los tiempos de la construcción del ferrocarril Córdoba – Málaga, vemos como las ilusiones de los ardaleños de tener estación de ferrocarril propia se les esfuma en beneficio de Álora. Para la construcción del ferrocarril el primer trazado de la línea férrea fue del ingeniero Máximo Perea y este seguía el itinerario de Campillos, Ardales – Carratraca pasando por el puerto de Málaga, Casarabonela, Coín… Málaga. El otro y definitivo, el que se llevó a cabo, fue del industrial Martín Larios que transcurría por el desfiladero de los Gaitanes, diez kilómetros más cortos, pero de una ejecución mucho más laboriosa y por ende costosa que la de Perea. Esta comprendía Bobadilla, Gobantes (de nueva creación), El Chorro (también de nueva creación), Las Mellizas, Álora, Pizarra… Málaga. Es decir, en el termino municipal de Álora habría tres estaciones, en detrimento de Ardales que se quedó sin ferrocarril.

A la izquierda los restos de la presa que tomaba el nombre de los tajos de la montaña de arriba: Tajo de los Aviones, más tarde también llamado de Andrade en honor del político ardaleño.
Foto: Clemente González


El siguiente “despropósito” para con Ardales fue la construcción del pantano del Chorro. Había empeño en construir una presa para un embalse de agua en el río Turón y había que buscar un sitio para edificarla, el sitio escogido fue una cerrada que hacía el río poco antes de la Junta de los Ríos, llamado “Cueva de las Golondrinas”. En ese sitio se comenzó a construir la presa del Pantano del Chorro. Pero antes, uno o dos años antes, se comenzó a construir otra presa en el mismo río Turón aguas arriba de Ardales, tomando el nombre de su ubicación: Pantano del Tajo de los Aviones, más tarde bautizada con el nombre de Andrade, en honor al abogado y político ardaleño Rafael de Andrade Navarrete. Esta presa podía dar lugar, aguas abajo, a regadíos de las tierras de Ardales, beneficiándose los cultivos de las aguas del embalse de Andrade en toda la extensión de terreno del termino municipal hacia el noreste, hasta el encajonamiento y su unión al río Guadalhorce.

Pero esa presa se paralizó, no así la del Chorro, que seguía un alto ritmo de crecimiento. Las obras del pantano de los Aviones seguían paradas, incluso se llevó maquinaria de esta obra a la del Pantano del Agujero que levantaba entonces el ingeniero Giménez Lombardo en el río Guadalmedina. En mayo de 1933 y después de ser invertidos tres millones de pesetas la presa de Andrade o de Los Aviones se propuso para su abandono definitivo. Se alzaron voces de “los vecinos de Ardales atribuyendo este abandono a influencias poderosísimas de quienes patrocinaban el pantano del Chorro”[1] Aún hoy día se pueden observar los restos de la presa inacabada y las ruinas de las casas, almacenes y talleres en el río Turón, al pie del tajo de los Aviones en la carretera de Ardales a El Burgo.



[1] Diario ABC, 3 de febrero de 1932, pág. 16

3 comentarios:

  1. Magnífica iniciativa, por fin tu blog. Enhorabuena hermano.

    ResponderEliminar
  2. Muy buena investigación Clemente Gonzales!!!
    Los restos de la presa de Andrade los habíamos visto hace años. Siempre preguntandome lo que signifacan estos restos. Ahora lo se yo tambien! ;)

    ResponderEliminar
  3. Me alegro mucho de que te haya gustado el artículo. El Chorro y toda la comarca está llena de curiosidades muy interesantes para los que nos gustan la historias locales.

    ResponderEliminar